Dia 5- Frómista- Carrión de los Condes. 22 kms por la vía alternativa.

Hoy la etapa ha sido más larga de lo previsto, en parte porque hemos cogido una alternativa algo más larga pero más bonita comoda para caminar y en parte porque la guía debe estar mal. Total, que entre pitos y flautas, el Gps contabiliza más de veintidos kilómetros.
Ha sido un día muy caluroso y sin nubes. Parece que al final las previsiones meteorológicas van mejorando y nos va a hacer buen tiempo todos los días. A ver si es verdad. Desde luego, hasta ahora no podemos tener queja. Ni una gota de agua y un calor relativamente soportable, que nos está permitiendo salir a horas decentes y no tener que madrugar demasiado para coger las horas mas frescas.
Hoy nos hemos levantado a las siete y media y lo primero que hemos hecho ha sido abrir las cortinas para ver la iglesia de san Martín. Una vez comprobado que no ha desaparecido por la noche, nos hemos arreglado rápidamente y hemos bajado a tomar un café al bar del hotel. Con estas, y tras comprar pan, a las nueve estábamos ya cruzando la plaza y enfilando la salida de Frómista.
Hay bastante movimiento de peregrinos a estas horas. Se nota que la etapa es corta y la gente aprovecha para dormir un poco mas. Delante nuestro va un grupo de seis orientales, supongo que Coreanos, que son la subraza de orientales que mas abunda en el Camino. Por lo que me han contado, para ellos es un honor hacer el Camino. Por lo visto aprecian mucho tener la credencial y la cuelgan en sus despachos o en sus casas en lugar de honor. Bien por ellos.
Salimos de Frómista cruzando por una pasarela la autopista Burgos - León. Inmediatamente comienza el andadero que lleva hasta Carrión de los Condes. Es un andadero recto como una vela y que va siempre pegado a la carretera. Firme muy bien cuidado y sin ningún accidente geográfico que reseñar. Un auténtico coñazo de andadero...
Lo único bueno que tiene es que cada doscientos o trescientos metros han colocado un grupo de cuatro mojones del Camino, con su vieira esculpida y todo, que amenizan la marcha. La verdad es que es bonito mirar las largas rectas llenas de mojones que se van alejando en la distancia y con los peregrinos transitando solos o en pequeños grupos entre ellos.
Atacamos este sendero con ganas. Desde el principio se ve ya a lo lejos la torre de la iglesia del primer pueblo al que tenemos que llegar, que está como a cuatro kilómetros.
Muchos peregrinos. En la larga recta parecemos una fila de hormigas, o mejor de caracoles arrastr@ndonos por el sendero con la casa a cuestas.
El paisaje es bonito pero monótono. Todo el rato campos verdes cultivados en un horizonte infinito donde apenas se ve un árbol de vez en cuando. De vez en cuando pasa un coche o un camión por la carretera, que discurre apenas a unos metros del andadero, alterando la paz y el silencio.
Paloma aguanta poco a mi lado y comienza a destacarse rápidamente. La veo pasando peregrinos a la velocidad del rayo y saludando y hablando con algunos. 
En menos de una hora sin dar una sola curva, nos plantamos en el primer pueblo de la jornada, que se llama Población de Campos. Es un pueblo absolutamente anodino, donde solo destaca la enorme iglesia, absolutamente desproporcionada para el pueblo, como suele suceder por estas tierras. Yo creo que la razón de esta desproporción es la versión medieval de "a ver quien es el que la tiene mas grande".  Estas iglesias en pueblos tan cercanos solían pertenecer cada una a una orden distinta. Así que si los Caballeros de San Juan veían que la iglesia de los Templarios erca mas grande que la suya, pues la ampliaban. Luego llegaban los Hospitalarios y hacían una aún mayor, que mas tarde era superada en otro pueblo por los Caballeros de Santiago..... Todo muy Español.
Con estas reflexiones atravieso el pueblo. A la salida me espera Paloma sentada en unas escaleras. Aquí tenemos que decidir entre dos caminos alyernativos . Podemos continuar por el aburrido andadero hasta el final de la etapa, o tomar un desvío que va cercano a la ribera de un río y que ofrece mas tranquilidad y mejores vistas a cambio de unos dos kilómetros mas de caminata.
Hay bastante gente pensando que hacer. Mientras esperamos y decidimos llegan los bilbaínos de las sillas de ruedas. Paloma les saluda y comentan que ellos van a seguir por el andadero, ya que parece mas fácil para los chicos. También llega un ,matrimonio de Madrid que viaja con su hijo adolescente y a los que conoce Paloma. También deciden ir por el andadero. Nosotros en cambio nos decidimos por el camino del río, que al menos ofrece mas variedad que el otro.
Partimos cada uno por su lado. Nosotros nos apartamos unos doscientos metros del camino principal y luego cogemos una senda que va paralela a él , pero más cerca del  rio y, sobre todo, a suficiente distancia de la carretera como para que esta no moleste.
Bastante gente a elegido también esta alternativa, así que seguimos bastante acompañados. Vamos a buen ritmo durante un primer largo tramo de unos cuatro kilómetros. El camino principal se ve casi todo el rato a nuestra izquierda. Vemos el siguiente pueblo por el que pasa el camino principal, Revenga de Campos, pero no entramos en él. Nosotros en cambio llegamos al cabo de cuatro kilómetros a un pueblo llamado Villovieco. Es un pueblo sin nada especial que se atraviesa en un momento. A partir de allí cruzamos el río y tomamos una senda muy bonita pegada al río y que arranca justo donde hay un área de descanso muy bien puesta y que está llena de gente que ya está harta tras más de ocho kilómetros. Nosotros decidimos seguir y enfilamos el sendero.
Es muy bonito y va pegado al río, que es pequeño. La gran ventaja es que el río refresca algo y los árboles dan sombra, que se agradece mucho, pues el sol está empezando a pegar mas fuerte.
A nuestra izquierda, ahora algo mas lejos, vemos el camino principal, por el que se ve avanzar a la gente a pleno sol, pues allí no hay ni un árbol. Me parece que hemos elegido bien.
A nuestra izquierda dejamos un pueblo llamado Villarmenteros, donde un individuo avispado ha construido un albergue que tiene la particularidad de que ha puesto uno tippis indios, por si alguien quiere cumplir un sueño infantil y dormir en un campamento apache.
Salvo este pequeño entretenimiento el sendero continúa igual durante seis kilómetros. A ratos es bastante accidentado, lo que le hace más ameno. Al final, comenzamos a ver Villalcazar de Sirga, el siguiente pueblo, a nuestra izquierda. Ahora estamos bastante mas separados del Camino principal y hay un bien trecho hasta el pueblo. El sendero termina en una carretera que lo cruza y que se toma hacia la izquierda dirigiéndonos ya directos al pueblo.  Antes pasamos por una ermita bastante insulsa que solo tiene la particularidad de que para llegar a ella hay que subir unas jodidas escaleras y de que afiuera tiene una curiosa fuente que se acciona con una bomba de mano.
Un kilómetro mas y llegamos por fin a Villa cazar de Sirga, el pueblo mas importante de la jornada y donde nos unimos de nuevo al Camino principal.
Paramos en la plaza del pueblo, justo a la puerta de la magnífica iglesia de Santa María la Blanca, una de las mas importantes del Camino y que es citada repetidas veces en las Cantigas de Alfonso X por los milagros de la Virgen del lugar. Destacan en la iglesia el magnífico retablo y tres sepulcros medievales, que son de un hermano d Alfonso X, de su mujer y de un caballero templario desconocido. A mi lo del caballero me suena mal. ¿Que pinta allí junto al hermano del rey y su mujer?. Suena a trio medieval que tira de  espaldas.
Nos sentamos en un bar de la plaza y tomamos un excelente pincho de tortilla. Aparecen las karinas, que han hecho el Camino normal y también aparece el matrimonio de Madrid al que hemos dejado en el desvío y que, a pesar de ser este mas corto, han tardado mas que nosotros.
Aprovechamos para comer algo y descansar en este sitio tan magnífico antes de afrontar los seis últimos kilómetros hasta Carrión de los Condes.
Estos se hacen de nuevo por el andadero del inicio de la jornada. Paloma se destaca de inmediato y yo sigo a mi ritmo. Ya comidos, el tramo se hace bastante pesado. Solo importa andar y andar sin perder el ritmo para llegar cuando antes al destino. Al cabo de un buen rato, al final de una pequeña subida comienza a verse la torre de la iglesia mas alta de Carrión. Esto siempre anima mucho. En realidad es una de las razones de que las torres de las iglesias sean tan altas. Permitían a los caminantes orientarse y llegar a destino. Ahora cumplen para nosotros el mismo cometido. Son como faros en la dura meseta,'que nos orientan a puerto.
Un par de kilómetros mas y cruzamos la carretera por primera vez para entrar ya en Carrión de los Condes. Como es habitual Paloma me espera en la entrada, charlando con unos conocidos.
Cruzamos Carrión, pues nuestro hotel está al otro ñlado del pueblo, en la salida del Camino. Es un último kilómetro que ahora escuece,pero que mañana agradeceremos.
Llegamos por fin a eso de las dos al hotel monasterio de San Zoilo. Es un precioso hotel construido en lo que fue en su día uno de los más importantes monasterios de la zona. El edificio es enorme, pero solo una parte está dedicada a hotel. El resto está desocupado. Es como un parador, tanto en aspecto como en servicios.
Ahora, antes de verlo, subimos a la habitación a descansar y arreglarnos. Es una habitación preciosas, con vistas a uno mide los dos claustros del monasterio.
Descansamos hasta las cuatro y media. Entonces bajamos a ver la iglesia y el claustro principal del monasterio. La iglesia no vale mucho, pero el claustro es una maravilla. Está perfectamente conservado y es muy amplio y alto. Todas las columnas y el techo están decorados con bustos y figuras. La parte central es un precioso espacio de césped con un árbol enorme justo en el centro. Nos hacemos varias fotos y luego salimos a ver el pueblo.
Hay mucha gente. Se nota que este es un pueblo muy turístico y entre peregrinos y turistas somos un montón. Vemos la iglesia de Santiago, que tiene una portada espléndida y que alberga en su interior un museo de arte sacro. Es una iglesia curiosa, pues ha sido prácticamente reconstruida, pero de una manera muy especial. Han dejado las paredes como estaban originalmente, pero han sustituido el techo derrumbado por un techo metálico para que se note perfectamente la restauración.Queda bien y bonito.
Recorremos el resto del pueblo hasta llegar de nuevo a la entrada. Vemos otra iglesia, donde está preparado un paso para las procesiones.
Después nos sentamos en una terraza a tomar algo. Ahora si que se está a gusto al sol, viendo pasar a la gente y descansando los pies.
A las siete vamos a misa y luego cenamos en un restaurante bastante bueno.Paloma toma una sopa y pollo asado y yo una ensalada de sardinas ahumadas y una chuleta. Muy bueno todo.
Al volver slmhotel ya hace fresco.Procuraos ir ligeritos, pero nos cruzamos con una procesión. Procesión castellana, negra, silenciosa y austera, pero muy bonita.
Pasada la procesión nos perdemos y acabamos en la orilla del río. Menos mal que está iluminada y encontramos fácilmente un sendero y unas escaleras que nos devuelven a la civilización.
Sin mas llegamos al hotel y vamos directos a la habitación.
Mañana tenemos una etapa muy monótona y muy larga y queremos salir pronto para intentar evitar las horas de mas calor.

TRIVIAL DEL CAMINO
Resulta divertido esto de las preguntas numéricas y de cálculo. Hoy tenemos cuatro ganadores. Y es así porque yo soy el juez y lo digo.
Juan ha acertado la pregunta de Tuy, ciudad hermanada con Frómista por ser esta cuna de San Telmo, patrón de los marineros.
Cristina ha dado con el famoso ladrón Erik el Belga, que expolió en su día el retablo de la iglesia del Castillo.
Pero ambos han fallado en el reto numérico, uno por arriba y la otra por abajo.
Los pasos que he dado hoy son aproximadamente 25.300. Y es así porque he hecho 22 kilómetros y mi paso es de aproximadamente 86 cm, por lo que doy unos 1150 pasos por kilómetro.
Quienes mas se han acercado han sido María, que al decir  28.000 pasos, se ha equivocado en 2.700  y Mari Cruz que con 22.200 se ha quedado a 3.100 pasos.
Ambas cifras me parecen lo suficientemente cerca,así que ganan los dos. He dicho.
Para hoy una pregunta sencillita, que es tarde y tengo sueño.
- Actualmente, al cruzarse dos peregrinos, acostumbran a decirse ¡Buen Camino!. Pero en la edad media, había dos palabras latinas que se decían los peregrinos para darse valor y fuerzas en el Camino. ¿ Que dos palabras eran estas y que significaban?.

Y como pregunta numérica, me voy a inspirar en Jean de la Porre:
- ¿ Cual va a ser el resultado final (máximo 120 minutos) del Real Madrid - Barca. (Por ese orden).

Buenas noches y buen sueño.