jueves, 26 de marzo de 2015

Una vez más, Semana Santa en el Camino

De nuevo en el Camino.
Llega Semana Santa este año más pronto que nunca. Llega al principio de la primavera aún con nieve y aún con restos del invierno que se resiste a morir.
Pero ahora es cuando toca continuar nuestra peregrinación anual por etapas que empezamos ya hace dos años Paloma y yo y que va acercándose a su fin.
Este año haremos el tramo desde León, donde acabamos el año pasado,  hasta Sárria, ya en Galicia y a tan solo ciento quince kilómetros de Santiago. En realidad, con este tramo podríamos dar por terminada nuestra peregrinación familiar, pues la parte que nos falta ya la hicimos el año 2.010 junto a Concha y Luis en el que fue nuestro primer e inolvidable Camino. Pero si es posible, aún nos gustaría terminar cuando podamos la peregrinación juntos en Santiago y continuar incluso hasta Finisterre, que aunque ya no es Camino de Santiago, si es un buen final en el lugar donde los primeros peregrinos creían que el mundo se acababa y las invencibles legiones romanas miraban aterradas como el Sol era tragado por el Océano.
Pero esto queda en el futuro. Lo inmediato es que mañana partimos de nuevo en el tren que nos dejará en León para desde allí comenzar el Sábado esta Semana de Peregrinación.
Nos toca este año uno de los tramos más bonitos y duros del Camino Francés. Saliendo de León tenemos que atravesar las dos cordilleras que guardan celosas la entrada a Galicia. Nos espera el Monte Teleno, con el pueblo semifantasma de Foncebadón a los pies de la Cruz de Hierro, punto más alto del Camino.
La llegada este año a la Cruz de Hierro la espero con ilusión, pues tengo una serie de encargos personales y de buenos amigos que cumplir en ese punto mágico donde uno puede descargar su espíritu y pedir, como desde hace más de mil años hacen los viajeros que vencen esta montaña sagrada desde tiempos Celtas,  por todos aquellos amigos y parientes que ya nos abandonaron. Si el lugar está nevado será una llegada maravillosa.
Después vendrá la espectacular bajada a Ponferrada y el Bierzo antes de atacar ya la entrada a Galicia por el puerto de O Cebreiro, lugar de milagros y de hermosas puestas de sol donde honraremos la tumba de Elías Valiña, artífice del Camino Moderno.
Dos grandes hitos en un Camino que cuenta con muchos más atractivos: el final de la meseta, el Paso Honroso de Hospital de Orbigo, la monumental Astorga con su castillo de Gaudí; los pueblos montañeros de Rabanal y el Acebo, la señorial Molinaseca, el misterioso castillo templario de Ponferrada, Villafranca del Bierzo colgada de las montañas, el andadero hasta Hospital, el Alto del Poio con una de las más hermosas estatuas que hay en el Camino; la bajada a Triacastela , el Malecón de Sarria…
Mucho…Mucho para una semana que espero sea tan fructífera personal y espiritualmente como las anteriores.
La mochila está preparada, los pies y el ánimo también. La compañía es la mejor…

Solo queda poner un pié delante del otro innumerables veces y abrir los ojos del cuerpo y del alma a lo que el camino nos ofrece.
¡ Buen Camino!

2 comentarios:

  1. Nos dais envidia y se nos ponen los pelis de punta recordando los lugares y monumentos que describes y de los cuales vais a disfrutar, como bien dices hacer la subida desde Rabanal a Foncebadon y La Cruz dd Ferro nevado es fantástico.
    Esperando tus crónicas y el trivial y a la espera de Nuestro Camino,

    Buen Camino Peregrinos

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  2. Buen camino amigos!!! Siempre fieles os seguiremos!!'

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